“Por lo tanto, no estén satisfechos con lo que ha sido dicho repetidamente; o con lo que es tradición; o con lo que es un rumor; o con lo que está en las escrituras; o con lo que es una conjetura; o con lo que es axiomático; o con lo que es un razonamiento engañoso; o con lo que es un prejuicio con respecto a una noción en la que se ha reflexionado; o con lo que aparenta ser la habilidad de otros; o con la consideración: ‘Este monje es nuestro maestro.’ ¡Kalamas!, cuando ustedes por sí mismos sepan: ‘Estas cosas son malas; estas cosas son censurables; estas cosas son censuradas por los sabios; cuando al ser adoptadas y aplicada estas cosas conducen al daño y al infortunio, abandónenlas.
Pero cuando ustedes por sí mismos sepan: ‘Estas cosas son buenas, estas cosas no son censurables; estas cosas son alabadas por los sabios; cuando al ser adoptadas y aplicadas estas cosas conducen al beneficio y la felicidad,’ entonces deberán practicarla y permanecer en ellas.”